jueves, 19 de marzo de 2009

El profesor importa

Hemos conocido los primeros resultados de la investigación de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Católica, que aplicando el “cálculo del valor agregado”, nos señala que la diferencia de tener un buen profesor supera hasta 2,3 veces la –para muchos- “condicionante” socioeconómica de las familias. Esta condición de origen de los estudiantes se instaló en el discurso de algunos políticos y muchos educadores a partir de la teoría de la reproducción de Pierre Bordieu (“La Reproducción. Elementos para una teoría del sistema de enseñanza”, 1970), para quien la educación es el agente fundamental de reproducción y de la estructura de las relaciones de poder y de las relaciones simbólicas entre las clases sociales, colocando énfasis en la importancia del capital cultural heredado en la familia como clave del éxito en la escuela.

Si bien esta explicación me sedujo por un tiempo, mantuve “la ilusión meritocrática” –al decir del propio Bordieu- de que la educación puede darle un vuelco a la vida de las personas y que la buena escuela y el buen profesor importan más en el éxito escolar que la condición de origen de los estudiantes. En efecto, los resultados de la investigación a que aludimos, confirma nuestra observación de la trayectoria institucional de la buena escuela, como del comportamiento profesional de directivos y docentes. No da lo mismo cualquier escuela, como tampoco cualquiera puede ser director de estas ni mucho menos un semiprofesional puede tener la responsabilidad ni en la transmisión de la cultura y los conocimientos, ni en los valores necesarios para la formación personal y ciudadana de las próximas generaciones.

No podemos esperar realizar nuevas “experiencias pilotos” para convencernos de la necesidad de un cambio profundo en las políticas educativas: donde la formación docente se encare con decisión y firmeza desde las universidades (procesos de selección de estudiantes, rigurosidad formativa y disciplinaria); que los directivos basen su autoridad en el liderazgo y conocimiento de la gestión escolar especializada para hacerse responsables del desarrollo profesional de los docentes que son parte de su equipo educativo, como del futuro de la formación moral y académica de los estudiantes cuyas familias les han confiado su provenir. Nuestro sistema escolar está estancado y no despegará mientras sigamos esperando la receta política, pues ninguna propuesta legislativa en discusión actual resolverá los problemas estructurales que ahogan la creatividad e impiden la colaboración.

Los docentes, sus directivos y dirigentes debieran exigir autonomía y confianza. Autonomía para que las escuelas puedan gestionar sus adaptaciones curriculares y sus estrategias metodológicas, para que los directivos puedan seleccionar y evaluar el desempeño de sus docentes como en toda entidad seria. Los docentes debieran exigir confianza en sus instituciones y condición profesional. Pero deben ser serios y responsables: hay que dirigir los establecimientos escolares con profesionalismo, tomar decisiones basadas en el conocimiento y no en la intuición o el parecer; deben realizar su trabajo profesional con rigurosidad y pasión, sin excusas; deben tener un trato deferente y respetuoso entre ellos y con los demás miembros de la comunidad escolar, especialmente con sus alumnos. El profesor enseña siempre y no puede otorgarse licencias en su vida pública pues ella termina repercutiendo en la propia sala de clases.

Hoy existe un consenso de que el grado de eficacia de la escuela debe ser medido con base en el progreso alcanzado por el alumno con referencia a su nivel de logro inicial (valor agregado), y no con base al nivel de logro actual (rendimiento “bruto”). Esta es una condición necesaria para que la comparación entre las escuelas sea “justa”. En este enfoque, entonces, la medición de eficacia institucional coincide con un criterio operacional del enfoque de justicia educativa. En efecto, esto puede dejar en evidencia que cuando una escuela es “buena”, lo es por que sus alumnos han mejorado sustancialmente su condición inicial y no porque su situación actual de buena escuela se deba a factores como la selección escolar o los recursos externos de que dispone. Indicadores “justos” del desempeño de la escuela necesitarán medir el progreso de los alumnos en la escuela, en vez de los “resultados” brutos en los exámenes nacionales. Otro aporte significativo dice relación con la calidad de los profesores: al interior de una escuela con cursos constituidos homogéneamente los avances son diferentes y cuando esas diferencias son significativas, es que es el profesor quien tiene debilidades en sus conocimientos o desempeños deficitarios.

Si el profesor importa, las políticas del sector deben ser coherentes: ingresos selectivos de estudiantes de pedagogía, rigurosidad académica en las universidades, prácticas de desarrollo profesional adecuadas a las necesidades de los estudiantes y un programa de compensaciones remuneracionales claro y estimulante. Mientras nuestros deseos de tener buenos profesores no coincidan con las medidas que tomamos, nuestra educación seguirá siendo un obstáculo para nuestros sueños de país desarrollado, inclusivo y más democrático.http://www.lanacion.cl/prontus_noticias_v2/site/artic/20090322/pags/20090322224805.html

jueves, 12 de febrero de 2009

NUEVO MUNICIPIO, NUEVAS TAREAS

El inicio de un nuevo periodo municipal es una gran oportunidad para plantear los desafíos institucionales de la administración en general y de la educación en particular. En este sentido, creemos que es necesario delinear cuales debieran ser nuestras ocupaciones y sueños para el nuevo periodo, en aras de fortalecer nuestro sistema comunal de educación:
1.- Se requiere una política integral de gestión local, que permita llevar adelante el proyecto comunal de educación. Aquí es necesario articular los proyectos educativos de las escuelas y liceos con las aspiraciones de la comunidad en torno a los desafíos valóricos y académicos de los establecimientos con financiamiento público.
2.- Se necesita un modelo flexible de gestión escolar que de cuenta de las particularidades de las comunidades educativas y no de las características personales de los directivos. La transitoriedad de los nuevos directivos hace más urgente un levantamiento de perfiles de los profesionales propicios para las comunidades que tenemos y un plan que supere la brecha de capacidades existente. Así como es impracticable imponer un modelo único, también lo es no hacer nada al respecto y dejar los colegios a la suerte de cada cinco años.
3.- Es urgente definir de manera precisa y diferenciada los roles y competencias de los directivos del sistema municipal de educación y sus niveles de gestión. La comunidad debe tener claridad sobre las responsabilidades y alcances de las atribuciones de quienes están a cargo de la administración local y de cada establecimiento escolar. No se puede eludir esta responsabilidad pensando en la quimera de un cambio o norma que nunca llega: claridad sobre las competencias de la escuela y del rol de la administración local, y por defecto, que está fuera del alcance de ambos y corresponde a niveles superiores.
4.- Tenemos que fortalecer la participación y el control ciudadano. Me parece necesario promover la generación de capacidades en los actores locales para que estos puedan ejercer sus derechos debidamente, pero también tener claridad sobre sus deberes. Nuestra aspiración local es tener una “comunidad educadora”, que promueva el respeto a los docentes, el ejercicio responsable del poder directivo, la interlocución prudente de los padres con la escuela, el deber y la consciencia de los estudiantes de que las tareas de hoy anuncian su futuro personal.
Desde ya, nuestra administración local debe asumir que es su responsabilidad asegurar condiciones de educabilidad para todos, promover la multiplicidad de recursos y de redes educativas eficientes, asegurar la calidad y equidad de los servicios, así como monitorear el aprendizaje de los alumnos, incentivar el desarrollo de innovaciones y reconocer el desempeño de las mejores instituciones educativas y sus profesores. Pero además, desarrollar acciones tendientes a trascender el ámbito estrictamente escolar, como la promoción de valores deseables, la participación y educación ciudadana, oportunidades para la población no escolarizada, apoyo a los padres para la educación de sus hijos, entre otros.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Estuve en China

El Gobierno de la República Popular China me invitó a ser parte de una delegación académico cultural para conocer el sistema educacional de enseñanza de idiomas y algunos íconos culturales en Benjing y Shanghai. Ha sido una experiencia única, he tenido la oportunidad, el privilegio y la satisfacción de conocer una cultura milenaria, sabia e impresionante.
En China todo es monumental, tanto lo antiguo como lo moderno. Lo antiguo da cuenta de una cultura fascinante, sorprendente y muchas veces seductora. La arquitectura, la lengua y las comidas representan la continuidad histórica milenaria de una sociedad que se transforma aceleradamente pero manteniendo su identidad ancestral. La Ciudad Prohibida, la Gran Muralla y Tiananmen no sólo constituyen símbolos de un pasado esplendoroso, sino además, da cuenta de una espiritualidad y sentido de la existencia humana que trasciende su propia nacionalidad. Lo moderno mantiene una continuidad cultural que se expresa no sólo en la arquitectura y la ingeniería urbana, sino también en una forma de ver el destino de la civilización como una continuidad histórica que hace recordar el “destino manifiesto” norteamericano. Me atrevo a señalar que los chinos se sienten protagonistas de la historia contemporánea y depositarios de la responsabilidad que tienen con el futuro de la humanidad, pero también, del lugar preponderante que tendrán ellos en el diseño mundial que se está configurando.
Llama la atención la urgencia con que han abordado el aprendizaje de idiomas extranjeros, especialmente el inglés, y donde el español está de moda. Tienen universidades y colegios dedicados a la enseñanza de idiomas, en los cuales un grupo importante son extranjeros que estudian chino mandarín. En la Universidad de Lenguas y Cultura de Beijing estudian 10 mil alumnos de los cuales la mitad provienen de 120 países; 17 chilenos, tres jóvenes de colegios municipales de Valparaíso y Chillán. En los colegios, enseñar idiomas extranjeros es desarrollar un talento similar al artístico o deportivo. Tuve la oportunidad de compartir con 50 alumnos de español, alumnos destacados para quienes el lema “aprender poco es peligroso” da cuenta de la rigurosidad con que abordan sus deberes y desafíos.
Destaca en las escuelas el nivel de organización. Alumnos y docentes aprovechan el tiempo para el aprendizaje y enseñanza efectivo con rigurosidad. Las escuelas y los profesores ocupan un lugar preferencial en su escala de respeto social; la cultura china promueve una especial veneración milenaria por el cielo, la tierra, la autoridad, el padre y el profesor. Los docentes -como en muchos sistemas educacionales exitosos-, no son los profesionales mejor remunerados, pero son respetados y gozan de condiciones favorables para su desarrollo profesional: tienen una formación exigente y permanente; tiempo para estudiar y preparar sus clases; salas de clases con la cantidad de alumnos adecuados a las exigencias de las materias que se imparten. En las escuelas el espacio físico es aprovechado al máximo para actividades pedagógicas, son centros de enseñanza total, no caben tiempo ni espacio para la recreación o el descanso: a la escuela se va a aprender o a enseñar y en ello son rigurosos. Los directivos de las escuelas son líderes y autoridades admirados y respetados, gozan de autonomía y son responsables de la disposición de los recursos materiales y humanos de sus instituciones. La organización nacional del sistema educativo no está orientada hacia el control sino a la evaluación y resultados que obtienen con sus alumnos, como la inserción en la educación superior o para el caso de la enseñanza del idioma, si estos luego de egresar son capaces de comunicarse y desenvolverse eficientemente en la lengua que han estudiado.
Lecciones para nosotros. Uno: algo que ya vislumbramos, urgencia a los desafíos de largo plazo, están ocupados en asegurar éxito en los próximos 20 ó 40 años y para ello la estabilidad y la perseverancia en lo que han definido constituye una definición relevante. Dos: la formación de las futuras generaciones no está mediatizada por las emergencias ni la coyuntura por muy importantes que estas sean, la escuela y los docentes gozan de perspectivas de largo plazo para lo cual la formación humanista es clave, la especialización es parte de las tareas de corto plazo de la cual la educación superior se hace cargo y ajusta permanentemente. Tres: la escuela y los docentes gozan de respeto tanto como instituciones que tienen una misión específica como de profesionales a los cuales se les reconoce autoridad en lo que enseñan.
Por último, el desarrollo económico y material de la China actual es sorprendente y monumental, me he quedado con la sensación y en alguna medida con el convencimiento, de que el curso de la historia está desplazándose hacia esta parte del mundo. Ya hemos mirado lo suficiente la experiencia de desarrollo que han experimentado en la última década, creo que es tiempo de pensar en el futuro en grande y acoger la invitación que nos hacen de ser socios del futuro en el que con toda seguridad, ellos ocuparán un papel de liderazgo indiscutido.

viernes, 14 de noviembre de 2008

Gobierno Central y Municipios: socios para una mejor educación

El próximo año nuevamente las municipalidades tendrán la posibilidad de utilizar los recursos del Fondo de Apoyo a la Gestión Municipal. Se han contemplado 53.800 millones en el presupuesto de 2009. Lo ideal es que esto fuese permanente y parte de la claridad de las reglas para el sector, de manera que tengamos la certeza que se requiere para la planificación de largo plazo, lo cual permitiría colocar urgencia a las tareas fundamentales, abordar los problemas estructurales y presentar programas coherentes con los desafíos de un sistema que permanece en la incertidumbre.

Esta es una oportunidad para enfrentar los problemas permanentes que han tenido los municipios para configurar un sistema local con capacidades para gestionar uno de los servicios más relevantes para los vecinos y que cada vez visualizan más como su responsabilidad. Si los municipios son capaces de invertir dichos recursos en generar capacidades de gestión que puedan mantenerse en el tiempo, habrán dado un paso en la dirección correcta; sin embargo, si estos recursos son utilizados para enfrentar las demandas emergentes, por muy urgentes que estas sean, sin la perspectiva de configurar una modelo de gestión de calidad para la educación comunal, habrán desaprovechado la oportunidad.

En efecto, en primer lugar, estos recursos pueden convertirse en una oportunidad única como nunca la han tenido para transformar sus unidades administradoras en entidades profesionales altamente competentes, que a su vez, puedan convertirse en un factor clave para el mejoramiento de la gestión educativa municipal y, por extensión, de la calidad de la educación de la cual son responsables ante sus comunidades. En segundo lugar, es una oportunidad para liderar un proceso de construcción de un proyecto participativo con identidad y sentido local, promoviendo la autonomía de las escuelas y configurando una política compensatoria a la política nacional, que como tal es insuficiente a las demandas específicas de sus localidades. Ello sería un aporte pertinente a la equidad en el territorio y ante actores visibles para los tomadores de decisiones.

Para el gobierno central, más que una nueva oportunidad para fortalecer la burocracia, debería aprovecharla como un espacio para construir con los municipios un pacto en el cual se defina qué es lo que se espera de ellos en materia de resultados que contribuyan al sistema nacional y donde se transfiera gradualmente la responsabilidad técnico pedagógica, única manera para que los municipios se tomen en serio la gestión de sus escuelas y puedan responsabilizarse de los resultados que obtienen sus alumnos en las pruebas nacionales y sus profesores en las evaluaciones de desempeño. En este sentido, se visualiza la posibilidad de construir un marco institucional que permita distinguir a municipios que realizan una buena y una mala gestión en materia educativa.

Transferir la responsabilidad técnico pedagógica a los municipios los obliga a construir o fortalecer sus equipos profesionales, privilegiando los criterios técnicos para su configuración por sobre los que legítimamente se originan en la política local. Además, de esta manera, avanzamos en el término de la doble dependencia actual de las escuelas municipales, lo que no sólo constituye una anormalidad sistémica, sino una muestra de desconfianza del poder central en los mismos municipios y en los propios profesores, a quienes pretende hacer responsables de los resultados de la gestión escolar cuando estos le son adversos. Pero también, se fortalece el diseño descentralizado que ha quedado a medio camino desde la reforma de los ochenta y se logra definir un esquema de roles y responsabilidades que otorga claridad a lo que se espera de cada actor, desde el Alcalde y sus equipos, pasando por los directores y profesores, hasta los padres y apoderados.

La descentralización es un proceso cultural, y el sistema educativo con toma de decisiones en el ámbito local, permite pensar la educación en un marco de referencia más amplio, dónde la visión no sectorial constituye una necesidad para responder a las demandas del desarrollo a nivel de cada territorio. Es en este ámbito, donde se construye el “sentido” de la educación, dónde se fortalecen las prácticas de inclusión social, de convivencia democrática y dónde se incorporan las demandas de las comunidades y de los padres para la formación de las nuevas generaciones, primeros mandantes y decisores de lo que debe hacer la escuela en temas tan sensibles como la formación para el trabajo y la formación valórica de los futuros ciudadanos.

La responsabilidad del buen uso de estos recursos no sólo tiene que ver con la transparente y eficiente administración de los mismos, sino que además, constituye una oportunidad para los municipios y el gobierno central para que con seriedad, puedan sentarse a definir un marco de cooperación y trabajo conjunto, superando la confusión y la desconfianza que a veces suele primar en esta relación ambigua.

lunes, 20 de octubre de 2008

INTERVENCIÓN DIA DEL PROFESOR

· La educación que se tiene es un buen indicador de cómo se vivirá en la edad adulta; tener un mayor nivel de educación significa que se tendrán ingresos más altos, una mejor salud y una vida más larga.

· En el mismo tenor, los costos financieros y sociales de largo plazo del fracaso educativo son elevados. La gente sin las aptitudes para participar social y económicamente genera costos más altos para la salud, el apoyo al ingreso, el bienestar de la infancia y los sistemas de seguridad social.

· Nuestro país necesita avanzar en materia de equidad y nuestra comuna puede apoyar una estrategia que fortalezca esta prioridad. De hecho, es el sentido que tiene nuestra estrategia de desarrollo educativo.

· La equidad tiene dos dimensiones. La primera es la imparcialidad, básicamente significa asegurar que las circunstancias sociales y personales, como el sexo, la condición socioeconómica o el origen étnico, no sean un obstáculo para realizar el potencial educativo.

· La segunda es la inclusión, es decir, garantizar un estándar mínimo de educación para todos, por ejemplo, que cada persona sepa leer, escribir y hacer operaciones matemáticas de acuerdo al nivel educativo en que se encuentra.

· Las dos dimensiones están estrechamente entrelazadas: atacar el fracaso escolar ayuda a superar los efectos de las privaciones sociales que a menudo provocan dicho fracaso. Por eso estamos apoyando la construcción de las salas cunas y jardines infantiles como municipio y que posteriormente asumimos su administración en la Corporación. Por lo mismo es que estamos impulsando la lectura en el primer año escolar, certificando su competencia y preocupados en que “Aquí nadie se queda atrás”, programa que ampliaremos desde el próximo año al logro y consolidación de otros saberes en otros niveles escolares.

· Así como nos ocupamos de los que tienen más dificultades para avanzar, también incentivamos y premiamos a los mejores: mantenemos y hemos completado la construcción de un Liceo de Excelencia para varones en el Liceo Nacional de Maipú, proyecto en el cual esta administración comunal aportó más de $750 millones para su conclusión, el 70% del costo total de las obras realizadas; estamos orgullosos de sus logros y seguiremos apoyando el fortalecimiento de sus buenas practicas docentes. Son los hijos de las familias de Maipú quienes se han beneficiado con sus éxitos.

· Lo mismo haremos en el Liceo de Niñas de Maipú que iniciará en marzo de 2010 sus actividades académicas. Como en el anterior, tendremos los mejores profesores: “en colegios de excelencia, profesores de excelencia”. Ese será el principio distintivo que permitirá tirar el sistema local de educación, junto con el desarrollo de talentos en el arte y el deporte.

· Podemos tener más escuelas como la República de Guatemala y Los Bosquinos, las cuales persistentemente han tenido resultados de los aprendizajes de sus alumnos superiores a sus pares en varias mediciones.

· Lo hemos dicho, lo hemos escrito y actuamos en consecuencia: queremos tener una Educación Municipal de Calidad, por eso estamos empeñados en dotar a nuestros colegios de los mejores recursos: desde ya hemos renovado la mitad de los computadores colocados por el Ministerio de Educación a comienzos de la década pasada, todos nuestros colegios tienen pizarra digital y banda ancha para la internet; equiparemos con material didáctico apropiado y recursos modernos de enseñanza todas nuestras escuelas los próximos años.

· Estamos incentivando a nuestros docentes para que se perfeccionen adecuadamente: hoy más de 200 directivos de nuestras escuelas y liceos siguen un curso de liderazgo con la Universidad de Harvard y 110 docentes siguen un curso de Mediación Escolar. Otros 100 docentes estudian inglés, para apoyar la generación de un ambiente propicio para su enseñanza, el mismo propósito tienen los cursos de inglés para más de 300 apoderados de nuestras escuelas cuyas clases comienzan el lunes.

· Hoy, más de 500 de nuestros docentes están en alguna actividad de perfeccionamiento o capacitación. En enero próximo, 40 profesores de matemáticas irán becados, al VI Congreso Iberoamericano de Educación Matemática que se realizará por primera vez en Chile, en la ciudad de Puerto Montt, con todos los gastos pagados.

· Para los próximos meses tenemos además, la construcción de un nuevo Liceo Polivalente, el reemplazo del Liceo Reino de Dinamarca e inauguraremos el año escolar 2009 en la nueva escuela Las América.

· En lo académico nuestros estudiantes talentosos tienen oportunidades, como los 70 del programa PENTA de la Universidad Católica, los 40 del Preuniversitario, más de 350 en las Escuelas Artísticas como la Orquesta Estudiantil, el Grupo de Danza, Coro o Teatro. Entre las Escuelas Deportivas destacan: canotaje, pesca deportiva, atletismo, hanbold masculino, box olímpico, basketbol femenino y pronto béisbol. Mantenemos 16 Escuelas Formativas donde participan casi mil de nuestros estudiantes de manera permanente. “El alumno a quien nunca se pide que haga lo que no puede hacer, nunca hace lo que sí puede hacer”.

· Esto es parte de lo que se ha realizado en la gestión del Alcalde Alberto Undurraga; la inversión inteligente, la que se potencia con los aportes externos, regionales o centrales, públicos o privados. Es la “política del abrazo” que busca socios y que nos permitirá invertir en infraestructura escolar más de M$8.000, entre 2008 y 2010, incomparable con cualquier otro periodo alcaldicio completo.

· Hoy tenemos una Corporación fortalecida, que es capaz de apoyar a sus escuelas transfiriendo recursos para la autogestión, proveyendo otros directamente –hoy los PADEM se ejecutan completamente-; tomando mejores decisiones, no sobre creencias, sino que en base a evidencias; orientando adecuadamente el sistema local, con capacidad de gestión administrativa y pedagógica. Hemos certificado nuestros procesos esenciales para servir mejor: somos la única administración local de educación del país con certificación internacional, lo cual además, nos obliga a ser más trasparentes y eficientes cada día.

· Definitivamente, no somos de los que se quedan de brazos cruzados esperando que de las alturas del sistema se nos diga lo que debemos hacer. Le hemos colocado urgencia a las tareas de largo plazo. Esa impronta está permeando nuestras escuelas con los proyectos del Fondo de Innovación Pedagógica que hemos re-instalado, con los incentivos que ofrecemos a los docentes destacados y competentes, con las metas y estándares que nos estamos colocando como sistema y como escuelas.

· Una buena educación comienza con una buena enseñanza. Nuestro trabajo debe tener la calidad que requiere el aprendizaje de calidad: cobertura curricular amplia, planificación total de las clases y evaluación permanente de los aprendizajes. Esa es la trayectoria del trabajo de la buena escuela, esa es la trayectoria del trabajo profesional del docente de hoy.

· Una enorme responsabilidad pesa sobre los hombros de las educadoras y educadores. Somos responsables de nuestras palabras, del tono con que las decimos; de nuestros silencios, de nuestros gestos, de los contenidos de nuestras enseñanzas, de las experiencias en las que hacemos participar a nuestros alumnos, de los ejemplos que damos con nuestra propia conducta, de nuestra vida pública.

· El educador tiene la obligación de ofrecer en sí mismo el ejemplo de lo que enseña, manifestándolo en lo corporal mediante el decoro, adecuándose a las circunstancias de lugar y tiempo. Las conductas del docente deberán ser coherentes con sus enseñanzas, que no sólo se basen en conocimientos sino en su modo de vida; esto le otorga autoridad moral y hace que sus alumnos lo consideren un referente ético con autoridad en lo que enseña. Franklin Jones dice: “Los niños son impredecibles. Nunca sabes cuál será la siguiente inconsecuencia en que te atraparán”

· Cuando un docente se inicia en su profesión, un impulso vital arrasa con todas las dificultades que salen al paso, y lo llevan a la perseverancia en el obrar bien, que éticamente debe mantenerla durante toda su carrera educadora.

· Enseñar es dejar una huella en las vidas para siempre. Cualquiera que recuerda su propia experiencia educativa se acuerda de los profesores, no de métodos, de técnicas, o de los recursos de la escuela. El profesor es la persona clave de la situación educativa. Él hace y deshace programas.

· De esta misma particularidad -la autonomía de la que goza el docente-, se deriva también la responsabilidad que tiene ante sus alumnos y sus familias y ante la sociedad, por la calidad de los aprendizajes de los primeros.

· Hoy el aprendizaje es el centro de nuestras ocupaciones, nuestra tarea también es convertir esta pasión en una satisfacción para todos. Y aunque, ya “Aprender es un placer;… el placer de aprender nunca se comparará con el placer de enseñar”.

· Con orgullo por lo que hemos hecho, con esperanza en que lo que estamos construyendo entre todos nos traerá mayores satisfacciones, podemos decirles hoy con franqueza: muchas gracias, celebremos nuestro día, para luego seguir trabajando juntos.

lunes, 13 de octubre de 2008

Los profesores que basan su autoridad en el aprendizaje son valorados por los jóvenes

Estudio de la Universidad Católica:
PAMELA CARRASCO T.


El enojón que sólo muestra poder, el buena onda, el formador, el del ramo difícil o el que no se mueve ni un milímetro del reglamento escolar. Cada profesor va adquiriendo en el día a día sus propias tácticas para ejercer la autoridad. Así lo muestra un estudio realizado por los académicos de la Facultad de Educación de la Universidad Católica, Guillermo Zamora y Ana María Zerón.

Los investigadores, a través de cuestionarios anónimos a más de 400 estudiantes (hombres y mujeres) de 2° medio de cinco establecimientos de grupos socioeconómicos medio-bajos de la ciudad de Santiago, les preguntaron cuál es el profesor al que más obedecen sus compañeros y por qué.

Las respuestas sorprenden. Y ponen en evidencia que en la práctica cada docente va construyendo sus estrategias para poner orden en la sala de clases.

Enfrentados a la pregunta de a quiénes obedecen más, el 20% de los estudiantes dijo que a los que aplican justa e implacablemente la ley. Este es el típico profesor que se apega al pie de la letra a lo que está escrito en el reglamento escolar y de ahí no se mueve. Tampoco tiene favoritismos ni hace distinciones con nadie.

Según el estudio, los jóvenes ven a estos profesores como confiables y entienden que sus normas son justas y conocidas.

El modelo menos mencionado por los alumnos (4,7%) es el del profesor que funciona a través de exigencias morales. O sea, que trata de que los estudiantes aprendan normas y valores que les servirán para la vida. Es el formador a la antigua, el maestro. "Nos reta para darnos a entender que nuestro futuro se ve desde ahora", dice una estudiante de 15 años.

Otra de las formas en que los profesores ejercen el poder es a través de una enseñanza rigurosa y exigente. Esta estrategia fue nombrada por el 17,3% de los estudiantes y alude a docentes que concentran todas sus energías en que los niños aprendan. Por eso explican claramente la materia y siempre les piden a los alumnos que se concentren en la clase.L

os estudiantes valoran y agradecen este modelo, porque sienten que el profesor está comprometido con que aprendan y tratan de hacer clases dinámicas."Obedecemos porque nos explica todas las veces que sea necesario, la clase es rápida y entretenida. Ojo, entretenida, no desordenada, ni mala; al contrario, es la mejor de las clases", dice un joven de 15 años.

A juicio de los académicos, esta es la mejor forma de asumir el liderazgo en una clase, porque centra la autoridad en ofrecer oportunidades de aprendizaje.

"Este profesor 'vende' muy bien su materia y logra que los niños sientan que importa aprender lo que él está enseñando. Se genera un aprendizaje significativo, el profesor logra que el contenido tenga sentido y que el alumno se vuelva más autónomo", dice Ana María Zerón.

Los extremos

Claro que estos no son los únicos tipos de autoridad a la que obedecen los escolares. El 17,3% de los jóvenes confiesa que en el curso le hacen caso al profesor que usa el temor ante el poder discrecional. O sea, al que se impone gritando más fuerte y dominando al curso porque tiene el poder del castigo y lo usa a su antojo. Incluso los niños lo llaman "corrupto", porque no sienten que sus reglas sean justas, sino que manipuladas a favor del profesor.

Aquí la sala de clases se transforma en un ring, donde hay vencedores y vencidos. El profesor obedecido gana esta batalla y domina a los alumnos mediante la técnica del terror.

"A ese profesor el alumno lo obedece 'para evitarse problemas'. Este profesor-amo tiene una mirada paternalista, de patrón de fundo", explica Zerón.

Al otro extremo del péndulo están aquellos docentes que apelan a los vínculos afectivos que generan con sus estudiantes. Los niños lo describen como el clásico profesor cariñoso, preocupado por ellos, buena onda y que se basa en esa relación de estima para pedirle obediencia a los alumnos. Si éstos le fallan, el vínculo tambalea.

Lo interesante es que este modelo es el único que presenta diferencias de sexo y es más obedecido por las mujeres (16,4%) que por los hombres (11,5%).

"Es interesante que el liderazgo afectivo parece ser mucho más frecuente hacia ellas, porque se asimila más a una conquista amorosa que a una relación educativa. Un alto porcentaje de las alumnas dice obedecer a un profesor porque es caballero, empático y las escucha", dice Guillermo Zamora.

Los desafíos

Si bien este tipo de autoridad resulta muy tranquilizadora para los niños, para el académico no es lo más recomendable, porque las demandas del profesor aparecen algo difusas y la relación no se centra en el saber. "Puede ser perverso en las relaciones pedagógicas", dice Zamora.

A juicio de los investigadores de la UC, esto demuestra que la autoridad del profesor no se ejerce de una sola manera y es algo que se construye según las estrategias de cada profesor. Sin embargo, algunas son mejores que otras. Mientras que las de los profesores que apelan a los lazos emocionales y los que usan su poder arbitrariamente están centradas en la "supervivencia" de los docentes, los otros modelos posibilitan el aprendizaje.

"Estos modelos favorecen la autonomía de los estudiantes y su proceso de aprendizaje, especialmente la estrategia del profesor que centra su autoridad en la enseñanza rigurosa, ya que la relación entre el docente y el estudiante está centrada en el saber", agrega Zerón.

Lo importante, a juicio de los docentes, es que este estudio muestra que la autoridad del profesor no está "ganada" de antemano ni dada sólo por el hecho de pisar el colegio, como ocurría antiguamente, sino que se debe construir.

"El problema es que los profesores llegan a la escuela sin tener una preparación inicial para ejercer autoridad. Eso poco se estudia en la universidad, pero el campo lo demanda y lamentablemente los profesores deben construir este rol en solitario, porque no es fácil decir frente a los colegas 'me sobrepasan mis alumnos'", añade Zamora.

"9,9% de los alumnos encuestados dice responder sólo a sus profesores jefes, sin cuestionarse ni explicar el porqué".

"Lo que dicen los alumnos"

Es la señorita que nos habla de que tenemos que mejorar siempre como seres humanos". (Acerca del maestro que se basa en exigencias morales).Hombre de 16 años.

"La profesora es buena onda y nos dice que no le gusta ser pesada, y que 'si ustedes me tratan bien, nos podemos entender' ". (Sobre el profesor que establece vínculos afectivos).Hombre de 15 años.

"Su mal genio y actitud hacen que mis compañeros le obedezcan a pesar de ser un profesor que no se soporta". (Respecto del docente que usa el temor e imponer su poder).Mujer de 15 años.

"Le obedecemos porque ella es muy buena profesora y quiere que nosotros seamos buenos estudiantes". (Acerca de quien se basa en la enseñanza rigurosa).Hombre de 15 años.

"Es estricto y respetuoso. Si alguien hace desorden, le cita al apoderado". (Respecto del profesor que aplica de manera justa los reglamentos).Hombre de 15 años.

lunes, 6 de octubre de 2008

La época de elecciones es clave para promover la educación cívica en los escolares

No tienen voto, pero sí tienen voz. Mientras los políticos alegan que las inscripciones de los jóvenes en los registros electorales caen en picada, diversas iniciativas buscan aprovechar esta coyuntura eleccionaria para reposicionar el tema de la educación ciudadana en la escuela.
La muestra más gráfica de este link entre la política y la educación está en la reciente alianza entre EducarChile y el portal Tu Eliges (http://www.tueliges.cl/), de la Fundación País Digital.

"Elecciones municipales 2008: Conociendo a los candidatos" se llama la planificación que EducarChile puso a disposición de los profesores para utilizar en 1° medio en el área de historia y ciencias sociales. En ocho horas pedagógicas, los alumnos analizan los postulados de los partidos políticos y les mandan preguntas vía web a los candidatos.

"Esta es una oportunidad para, aprovechando el contexto de las elecciones, promover la democracia ciudadana y digital, porque en el vínculo entre los jóvenes y la ciudadanía, las tecnologías juegan un rol fundamental", dice Hugo Martínez, director de EducarChile.

Para Ana María Rosende, directora del área de Educación de la Fundación País Digital, esta es una muy buena instancia para que los estudiantes se sientan ciudadanos. "A los jóvenes les es muy difícil ser escuchados, pero a través de la web el candidato no sabe qué edad tiene el que le hace la pregunta y se la debe responder igual", explica.

Transversal

El ramo de Educación Cívica como tal dejó de existir con la última reforma curricular del Ministerio de Educación. Pero esto no significa que desapareció del mapa escolar. En 2004 la Comisión de Formación Ciudadana, en la que participaron diversos actores de la sociedad, ratificó la formación de hábitos ciudadanos como un objetivo transversal que se desarrollaría fuertemente en Estudio y Comprensión de la Sociedad en educación básica y en Historia y Ciencias Sociales en la media.

Pedro Montt, jefe de la Unidad de Currículo y Evaluación del Mineduc, comenta que esto llevó a que se revisaran los contenidos de estos ramos y se hiciera un ajuste curricular para profundizar estas materias.

Eduardo Araya, director de Gobierno y Gestión Pública del departamento de Asuntos Públicos de la Universidad de Chile, cree que el hecho de que la educación cívica saliera de su asignatura y se instalara transversalmente en distintas áreas es un buen enfoque; sin embargo, dice que hay algunos temas que revisar, como la intensidad y el año en que esto se incorpora al currículum y la formación de profesores en esta área.

Temas de interés

A su juicio, la formación cívica y ciudadana no se debería intensificar en Enseñanza Media, sino que debería partir con fuerza antes. "Se puede jugar a ser ciudadano en la escuela, a ser presidente, a administrar un gobierno, etc. Es importante que los niños se vinculen desde chicos a lo que es su sociedad, de modo de formarlos en valores como la tolerancia, respeto, defensa de las propias ideas, etc.", dice.

Araya también advierte sobre la importancia de sintonizar con los intereses de los jóvenes. "Hoy la ciudadanía se expresa en distintas áreas, como las ciencias, la biología, etc. Los temas de la sociedad tienen que ver con medio ambiente, biotecnología, pobreza, minorías, y los jóvenes son muy permeables a esos problemas. Lo cívico no es sólo lo partidista", sostiene.

Es que más que educación cívica, lo que hoy se persigue es la formación ciudadana.

En esa dirección va la iniciativa de la Fundación Futuro junto con Chile Transparente, que la semana pasada presentó sus guías metodológicas "Cómo y para qué hablar de corrupción y transparencia", que se pueden descargar desde www.fundacionfuturo.cl"

Lo que hacen estas guías es hablar de algo que se ve constantemente en las noticias y mostrarles a los niños que hay focos de corrupción en nuestra vida cotidiana, como cuando se copia en una prueba, o se roba el libro de clases. La idea es que los niños vean que no sólo se es ciudadano cuando se es adulto o para las elecciones", dice Magdalena Piñera, directora de Fundación Futuro.

Se acerca la prueba Cívica

Los días 12 y 14 de noviembre se realizará en Chile el Estudio Internacional de Educación Cívica y Formación Ciudadana (ICCS), una medición en la que participan más de 30 países y que investiga de qué manera los jóvenes de 8° básico están preparados para asumir sus roles como ciudadanos. En esta prueba participarán 180 establecimientos de todo el país y los resultados estarán en 2010. En Chile, el último estudio de este tipo mostró que los escolares chilenos están once puntos bajo el promedio internacional en el conocimiento de temas de democracia y ciudadanía.

Buena herramienta

"Este tipo de herramientas digitales, donde los estudiantes se informan y no sólo aprenden e investigan, sino que también pueden hacer preguntas a los candidatos sin tremendamente desafiantes y acercan mucho a los jóvenes a los temas sociales". HUGO MARTÍNEZ Director de EducarChile

"Si la sala no abre sus puertas de par en par a la realidad nacional, no tiene sentido para los niños, sobre todo si queremos formar adultos protagonistas, comprometidos e inquisitivos con la realidad en que están insertos". MAGDALENA PIÑERA Directora de la Fundación Futuro

"El hacer que la educación cívica entre dentro de las salas de clases depende mucho de la importancia que en los colegios se le de a este tema. No basta tener herramientas, lo importante lo ciudadano como tema se instale en las escuelas cotidianamente". ANA MARÍA ROSENDE Jefa del área de educación de Fundación País Digital

"Para los colegios la mejor estrategia es vincular a los niños con sus problemas y lo que les importa y desde ahí ir formándolos cívicamente, para que sepan como funciona el sistema, cuáles son los caminos ciudadanos para resolver sus problemas, etc." EDUARDO ARAYA Departamento de Asuntos Públicos de la Universidad de Chile.