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lunes, 17 de noviembre de 2025

La implementación de la pena de prestación de servicios en beneficio de la comunidad como desafío para la VcM en la Universidad de Los Lagos


Recientemente, la Universidad de Los Lagos y Gendarmería de Chile han firmado un convenio de colaboración como un marco de cooperación mutua para la generación de condiciones que permitan la implementación y posterior ejecución de la pena sustitutiva de prestación de servicios en beneficio de la comunidad. En este convenio, la universidad se compromete a ofrecer plazas de servicios voluntarios y no remunerados a Gendarmería de Chile, quien las destinará a las personas que deben cumplir la sanción penal impuesta, realizando actividades que beneficien a la comunidad o a personas en situación de precariedad.


El potencial del cumplimiento de penas remitidas en trabajo comunitario en el ámbito universitario representa una alternativa prometedora a las sanciones tradicionales, como la privación de libertad, especialmente para delitos menores o infracciones cometidas por jóvenes. Esta aproximación combina objetivos de reinserción social, educación y servicio a la comunidad, aprovechando el entorno académico como un espacio de transformación y aprendizaje. Más allá de las formalidades, este convenio conlleva una gran capacidad para lograr mayores niveles de vinculación de la universidad con un actor no tradicional y de baja visibilidad en el territorio, pero cargado de un sesgo de discriminación social.

Una relación de esta naturaleza tendrá, sin duda, un impacto positivo en la comunidad universitaria, ya que no solo se acogerá a infractores que podrán mantener sus vínculos sociales y eventualmente académicos mientras cumplen sus penas, lo que podría reducir la reincidencia y, a la vez, fomentar la adquisición de habilidades blandas como la empatía, la responsabilidad y el trabajo en equipo. Además, se podrán desarrollar habilidades de carácter técnico, por ejemplo, al participar en proyectos de impacto social.

Otros impactos positivos que se pueden esperar se originarán en iniciativas de acogida que puedan desarrollarse, por ejemplo, en el marco de la creación de proyectos de servicio comunitario, logrados a través de la implementación de tutorías a grupos vulnerables, mantenimiento de espacios verdes y apoyo en bibliotecas. Esto, indudablemente, enriquecerá la misión de la universidad, fortaleciendo su responsabilidad social y su relación con el entorno. También se podrían esperar efectos sobre el sistema carcelario, como la reducción de la sobrepoblación y los costos asociados, desviando casos de baja peligrosidad hacia sanciones que se alinean con modelos de justicia restaurativa, donde la reparación del daño a la comunidad es central. Adicionalmente, es una oportunidad para que la universidad pueda crear programas interdisciplinarios (derecho, psicología, trabajo social) para supervisar y evaluar el cumplimiento de estas penas, convirtiéndose en un laboratorio de innovación social.

Entre las consideraciones que es necesario contemplar está la previsión de estigmatizaciones y exclusiones dentro de la comunidad universitaria, lo que implica evaluar el perfil de elegibilidad de los infractores (por ejemplo, faltas y delitos leves) para garantizar recepciones acogedoras y claras, así como la asignación de personal previamente preparado. Además, se pueden implementar programas específicos como alfabetización digital y apoyo tecnológico a comunidades; integrar componentes educativos como talleres de derechos humanos y resolución de conflictos como parte de la sanción; y establecer métricas de éxito, como tasas de reincidencia, impacto comunitario y satisfacción de los participantes. En definitiva, constituye una oportunidad para diseñar un modelo pertinente, considerando la evidencia de ejemplos inspiradores, como las experiencias de la Universidad de Barcelona, que involucra a jóvenes infractores en tareas de apoyo en proyectos sociales, o el programa "University-Based Community Service", donde universidades norteamericanas vinculan a jóvenes con penas judiciales en labores de mentoría o ambientalismo, bajo supervisión académica.

El potencial de este convenio para que la ejecución de la pena sustitutiva de prestación de servicios en beneficio de la comunidad, remitida en trabajo comunitario en la universidad, puede ser el germen de la construcción de un programa de VcM que aborde los desafíos legales, logísticos y sociales, y que se constituya en una alternativa que no solo humaniza el sistema de justicia, sino que fortalece el rol de la universidad como agente de cambio social. Una implementación cuidadosa, con evaluación continua, puede convertir esta medida en un pilar para la justicia restaurativa en el ámbito educativo y en el fortalecimiento de la vinculación de la universidad con un sector estigmatizado y ansioso de oportunidades para la reinserción de ciudadanos que han incurrido en faltas o infracciones a la convivencia social.

https://opinion.cooperativa.cl/opinion/educacion/pena-de-prestacion-de-servicios-a-la-comunidad-desafio-en-la/2025-11-17/000641.html

https://www.ulagos.cl/opinionulagos/la-implementacion-de-la-pena-de-prestacion-de-servicios-en-beneficio-de-la-comunidad-como-desafio-para-la-vcm-en-la-ulagos/



La Educación en STEM: Impulsando la Estrategia Regional en Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación (CTCI)

En un mundo en constante transformación, donde el cambio es la única constante, surge un imperativo ineludible: preparar a las futuras generaciones para navegar en un océano de complejidad. La ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas —las siglas STEM resuenan con fuerza— se erigen como los cimientos sobre los cuales se construyen la economía dinámica, la innovación audaz y el desarrollo sostenible. Estos son, sin lugar a dudas, los pilares que sostienen el bienestar colectivo en nuestra sociedad.

Sin embargo, el panorama no es tan optimista. A pesar de los esfuerzos, las brechas en el sistema educativo regional son abrumadoras. La falta de laboratorios equipados, la conectividad deficiente y la escasa formación de docentes para impartir una enseñanza práctica en ciencias son obstáculos que golpean la calidad educativa. Los resultados de las evaluaciones nacionales en ciencias y matemáticas son un reflejo preocupante, posicionando a nuestra región por debajo del promedio nacional. Y eso no es todo: la escasa representación de mujeres en carreras tecnológicas y científicas se convierte en un desafío acuciante, limitando las oportunidades laborales en sectores estratégicos como la acuicultura, la agroindustria, el turismo sostenible y las energías renovables.

En este contexto, la educación STEM emerge como una estrategia pedagógica revolucionaria. No se trata simplemente de transmitir conocimientos en asignaturas aisladas; se busca promover un aprendizaje activo, donde los estudiantes se conecten con problemáticas reales de su entorno. Imagine construir sensores para monitorear la calidad del agua o diseñar sistemas de energía solar en las escuelas. Estas experiencias no solo cultivan el pensamiento crítico, sino que también fomentan la creatividad y el trabajo colaborativo, habilidades esenciales en el siglo XXI.

Las universidades regionales, por su parte, deben trascender su papel tradicional. Su responsabilidad no se limita a formar profesionales; deben involucrarse activamente en la educación básica y media. La articulación entre el conocimiento universitario y las escuelas locales puede cobrar vida a través de laboratorios móviles, ferias científicas, programas de mentoría y talleres. Este puente eficaz conecta la educación media con la superior, y fusiona el conocimiento académico con la realidad cotidiana de las comunidades. Ejemplos globales, como el programa Project Lead the Way en Estados Unidos o los STEM Ambassadors en el Reino Unido, ilustran el impacto positivo de tales iniciativas. En Chile, ya hay universidades que comienzan a implementar modelos similares, adaptables a las particularidades de la Región de Los Lagos, en colaboración con servicios públicos regionales y locales.

Además, la promoción de la educación STEM se convierte en un motor de equidad social. Facilita el acceso de niñas, jóvenes rurales y estudiantes de pueblos originarios a oportunidades educativas que, históricamente, han sido esquivas. La inclusión de mujeres en áreas tradicionalmente dominadas por hombres no solo diversifica, sino que también enriquece la innovación científica. Así, la educación STEM no solo forja futuros profesionales; expande las posibilidades de desarrollo humano y territorial.

En resumen, el futuro de la Región de Los Lagos está intrínsecamente ligado a nuestra capacidad para formar jóvenes curiosos, creativos y competentes, preparados para enfrentar los desafíos que se avecinan. La ciencia y la tecnología no deben ser vistas como privilegios, sino como derechos universales que las autoridades e instituciones públicas tienen la obligación de garantizar. Fomentar la educación STEM es, por tanto, una decisión ética y estratégica crucial para el progreso sostenible de nuestra región.

#STEM #educación #ciencia #tecnología #matemática 

https://www.paislobo.cl/2025/11/la-educacion-en-stem-impulsando-la-estrategia-regional.html

https://elinsular.cl/opinion/2025/11/15/la-educacion-en-stem-impulsando-la-estrategia-regional-en-ciencia-tecnologia-conocimiento-e-innovacion-ctci/

https://thepuertovaras.cl/contenidos/la-educacion-en-stem-fortalece-la-estrategia-regional-en-ctci-por-carlos-delgado-alvarez-dr-en-ciencias-de-la-educacion-profesional-de-la-direccion-general-de-vinculacion-con-el-medio-ulagos/



jueves, 6 de noviembre de 2025

Vinculación con el medio: el alma pública de la calidad universitaria



En Chile, hablar de calidad universitaria suele remitir de inmediato a acreditaciones, estándares y procesos administrativos. Sin embargo, detrás de esa trama tecnocrática se juega la profundidad del sentido público de la idea de universidad. En efecto, la Vinculación con el Medio (VcM) ha emergido como el espacio donde la calidad se verifica socialmente, donde la institución demuestra -o no- su compromiso con el territorio, con la equidad social y con el desarrollo sostenible.

Durante años, la extensión universitaria fue concebida como una suerte de “proyección cultural” hacia el entorno, un gesto unidireccional desde la academia hacia la sociedad. Hoy, ese paradigma se ha transformado y la VcM es una función académica en sí misma, bidireccional, sistemática y con capacidad de generar conocimiento situado. Ya no se trata de “llevar” saberes, sino de construirlos colectivamente con los actores del territorio, lo que en la práctica institucionaliza la co-creación social del conocimiento.

La Comisión Nacional de Acreditación (CNA) ha recogido este cambio de enfoque impulsado por la nueva legislación que regula la educación superior en su nuevo marco de criterios y estándares. Ya no basta con enseñar e investigar, sino que las universidades deben también demostrar cómo sus acciones dialogan con los desafíos públicos, cómo su quehacer contribuye efectivamente al bienestar de las comunidades. De esta manera, la calidad universitaria se redefine y deja de ser solo eficiencia o cumplimiento, para incorporar la pertinencia, el impacto y la legitimidad social.

La experiencia de la Universidad de Los Lagos es ilustrativa de este nuevo horizonte. Como universidad estatal y regional, ha incorporado la Vinculación con el Medio como la relación con el territorio de manera integral y multidimensional. Su política de VcM y el Plan Estratégico de Desarrollo Institucional 2030 no la entiende como un complemento, sino como una dimensión estructural del proyecto educativo. De ahí surgen programas como la Escuela Universitaria para Dirigentes Sociales, el Programa ULagos para Personas Mayores, o el Fondo Talento Joven, todas iniciativas que conectan formación, ciudadanía e innovación social en los territorios del sur del país.

Estas experiencias muestran que la calidad universitaria se mide también en la capacidad de la institución para escuchar, articular y responder con pertinencia. Cada proyecto, cada alianza, cada diálogo territorial es una evidencia del sentido público de la universidad. En este contexto, la Vinculación con el Medio se convierte en una forma concreta de responsabilidad social universitaria, pero también en un acto de esperanza de que el conocimiento siga siendo un bien público y común.

El desafío, sin embargo, es enorme. Se requiere avanzar en la evaluación de resultados, no solo de impactos, sino también de posicionamiento y pertinencia territorial, entre otros; así como también, de integrar con fuerza la VcM al currículum formativo; y fortalecer la articulación con la investigación aplicada y la innovación social. En tiempos de crisis climática, fragmentación social y desconfianza institucional, la universidad tiene la oportunidad de constituirse en un espacio de encuentro y creación colectiva de propuestas de solución a los problemas territoriales, a los desafíos de mayor bienestar e integración social.

Asegurar la calidad, entonces, no es simplemente cumplir con una norma. Es también asegurar la relevancia de lo público, la vitalidad del territorio y la vigencia del conocimiento como fuerza transformadora. La Vinculación con el Medio, entendida así, no es un requisito más del sistema de acreditación, sino que es el alma pública de la calidad universitaria.

https://www.ulagos.cl/opinionulagos/opinion-vinculacion-con-el-medio-el-alma-publica-de-la-calidad-universitaria/

#universidad #vinculaciónconelmedio #VCM #acreditación

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