El gran desafío pedagógico de nuestro tiempo no es solo curricular, metodológico o tecnológico. Es, sobre todo, espiritual y político. Necesitamos docentes capaces de sostener la incertidumbre sin ceder al cinismo, directivos que lideren con visión ética y comunidades educativas que encarnen el cuidado mutuo como forma de esperanza colectiva.
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domingo, 13 de abril de 2008
jueves, 10 de abril de 2008
domingo, 23 de marzo de 2008
lunes, 31 de diciembre de 2007